¿Te acuerdas de esos anillos que tenías en tu adolescencia que cambiaban de color con el contacto frío o caliente?
Nos parece una broma al lado de todo lo que ha conseguido la unión de moda y tecnología. Zapatos con luces, prendas que no se manchan ni se mojan y que incluso cambian de color con el agua.
¿Y si la prenda que llevamos puesta nos avisara también de la contaminación?♨
El diseñador neoyorquino Nikolas Bentel, ha creado camisetas estampadas que cambian de color en respuesta a la contaminación del aire o la radiactividad.
Llamadas Aerochromics, responden a los cambios en la calidad del aire.
Sobre todo cambian cuando el aire está muy contaminado y no es apto para la salud.
Una camiseta reacciona con partículas radiactivas, otra con monóxido de carbono,y la última con libres contaminantes
Bentel vende dos camisetas en su web: Las reactivas o no reactivas. Las primeras tienen un precio de 400€ aprox, mientras que las que no son reactivas cuestan 80 €.
¿Es esto una forma de controlar el medio ambiente siendo conscientes del aire que nos rodea?
#WAG1MAG