El pasado 16 de octubre se estrenaba la esperada película de la serie Demon Slayer Kimetsu no Yaiba: The Infinity Train.
Ya se ha convertido en una de las películas mejor recibidas de la historia.
La pandemia ha retrasado algunos de los estrenos más esperados de 2020.
Frozen 2 o Jumanji eran tan sólo algunos de los filmes que hubiéramos podido ir a ver sin la pandemia del coronavirus. Para los más perdidos en anime, Demon Slayer Kimetsu no Yaiba es una serie de manganime a la que han decidido hacer una película.
Esperada por todos sus fans en Japón no ha defraudado a nadie. Todo un éxitazo en taquilla. Más de 44 millones de dólares recaudados en el primer fin de semana, récord absoluto de la historia del cine japonés. Recordemos que Frozen en su finde de estreno sólo llego a los 18 millones de dólares.
¿Por qué ha cosechado tanto éxito?
Nunca se puede saber la fórmula exacta para que algo triunfe de tal manera. Mismamente la propia viralidad a veces no tiene demasiada explicación. En el caso de esta peli de anime, la trama principal hace mucho para que esto sea así. La peli está basada en el manga homónimo Koyoharu Gotôge.
Tanjirô Kamado, el joven protagonista, ve su vida cambiar por completo cuando su familia es asesinada por un demonio y su hermana es convertida en uno de ellos. Él es el único que sobrevive y hará todo lo posible por vengar a su familia y traer a su hermana devuelta a la vida.
Una historia inspiradora, conmovedora y llena de efectos especiales. Si eres fan del manga no te puedes perder este gran estreno. Y sino lo eres, te recomendamos que le empieces a dar una oportunidad a este mundo tan mágico y fantasioso.
¿Quién no quiere disfrutar de una peli tanto cómo lo hacía de niño?



