Debemos recordar que el 8 de marzo no es sólo un día y que todos los días son el Día Internacional de la Mujer.
Este día que, como muchos otros, se creó para derribar barreras, para acercarnos unos a otros y para demostrar que nunca es suficiente cuando se trata de luchar por aquello en lo que creemos. Las razones de la existencia de este día son obvias: Vivimos en un mundo donde cada 10 minutos una mujer es asesinada a manos de su pareja o ex-pareja, un mundo donde prácticamente todas las mujeres hemos recibido algún acto de acoso machista, verbal o físico, en reiteradas ocasiones a lo largo de nuestra vida, los sueldos de las mujeres siguen estando por debajo los de los hombres desempeñando exactamente el mismo trabajo… Podríamos seguir con esta lista hasta quedarnos sin espacio, pero todos nos hacemos una idea.
Imagen vía @flavitabanana
Diversas organizaciones feministas han convocado, alrededor de todo el mundo, una huelga de empleo y consumo, en el que se invita a todas las mujeres a abandonar su puesto de trabajo, durante todo el día de hoy o durante algunas horas concretas, para demostrar al mundo lo necesarias e insustituibles que somos a todos los niveles. Esta huelga se ha convocado en innumerables países del mundo, pero sobretodo está teniendo gran repercusión en Latinoamérica, debido a que esta iniciativa comenzó en Argentina por parte de la asociación Ni Una Menos.
Ahora bien, existe un conflicto muy grande en torno al papel de los hombres en las cuestiones de feminismo. Nos topamos continuamente con artículos y reportajes en los que califican de «absurdo» el hecho de que un hombre quiera participar en la lucha junto a sus compañeras feministas; dicen que el Día Internacional de la Mujer es un día dedicado a ellas, y por tanto, «querer la misma visibilidad y protagonismo que la mujer hasta en el único día dedicado a ellas no tiene sentido».
Estas afirmaciones no son sino razones directas por las que necesitamos de este día y de sus manifestaciones, queda mucho trabajador hacer y muchas mentes que concienciar. El hecho de que se quiera vetar a los hombres a participar en la lucha como si el feminismo no les afectase también a ellos, significa que aún, y pese a todos nuestros esfuerzos, no se entiende absolutamente nada lo que significa el feminismo.
Ser feminista supone no entender de sexos, significa igualdad completa y absoluta tanto de derechos como de condiciones, significa entender de seres humanos, no de hombres y mujeres. Los hombres nos quieren de la misma manera que nos queremos nosotras: iguales, libres y vivas.
Desde WAG1MAG, queremos hacer un llamamiento a todos los hombres y mujeres a participar en todas las manifestaciones y eventos convocados para el día de hoy, para demostrar a todas esas personas que aún no terminan de entenderlo, que no existe exclusión ni diferencia cuando hablamos de feminismo.
#DíaInternacionalDeLaMujer
#WAG1MAG